El diagnóstico y el tratamiento oportuno de las patologías psiquiátricas, permite:

  • Reducir el sufrimiento psíquico del paciente y de su entorno.
  • Reducir las consecuencias derivadas de la patología.
  • Evita o minimiza internaciones psiquiátricas.
  • Establecer pautas terapéuticas personalizadas según la patología de base y estructura psíquica.